Nuestra
protagonista de hoy es, posiblemente, una de las mujeres españolas más formadas
futbolísticamente de nuestro país. Por un lado lleva dos años trabajando para UEFA y FIFA como
analista y, desde el punto de vista de los banquillos, dejó nuestro país para dirigir a la selección femenina de
Azerbaiyán.
Hoy hablamos con Patricia González, quien dentro de la Real Federación de Fútbol de Madrid, dirige la parcela deportiva,
coordinación y gestión de las selecciones territoriales, centro de
tecnificación y estrategias de desarrollo del fútbol femenino amén de dirigir
la selección Sub'18.
Como hago con todos los invitados al blog, para el que
no te conozca, ¿Quién es Patricia González? ¿Cuáles son tus principios, tu
trayectoria y evolución en el mundo del fútbol?
Una persona
muy afortunada por poder dedicar su vida a lo que realmente le apasiona. Desde
que empecé a entrenar con 17 años, el esfuerzo y la constancia han sido dos valores
que he intentado tener siempre presentes. Era muy consciente desde que empecé a
estudiar CCAFyD y a formarme como entrenadora, que esta no iba a ser una
carrera fácil. Intento aprender día a día y los últimos años me han enseñado
que la paciencia es otra de las claves para mantenerse en la carrera. También a
gastar mi energía en lo que sí puedo cambiar, en lo que está en mi mano.
Luego hablaremos de tu faceta de jugadora, de
entrenadora, de seleccionadora… pero, ¿Cómo surge la oportunidad de llegar a
ser la directora deportiva del fútbol femenino y seleccionadora Sub-18 de la
Real Federación de Fútbol de Madrid?
Surge con la
llegada del nuevo Presidente. Uno de los principales objetivos de la Federación
con el nuevo proyecto es impulsar el fútbol femenino y me pareció un reto muy
atractivo. Creo que dar autonomía al Fútbol Femenino tiene un mayor impacto en
su desarrollo.
¿En qué consiste exactamente tu trabajo en la Real
Federación de Fútbol de Madrid?
Por un lado,
la dirección deportiva de las selecciones territoriales con todo lo que ello
implica (planificación, comunicación con clubes, seguimiento, citaciones...)
junto con la supervisión de Centro de Tecnificación (en el que este año tenemos
grupo femenino); y por otro lado junto con la Comisión de Fútbol Femenino,
proponer planes de mejora de nuestras competiciones y proyectos de
desarrollo.
¿Cómo es tu día a día?
Depende de la
semana y del día. Los lunes tenemos Centro de Tecnificación o entrenamiento con
la selección sub12, que comienza ahora. Normalmente los miércoles son días de
entrenamiento de las selecciones. El resto de días dedico mi tiempo a todo lo
que hablábamos anteriormente. Y los fines de semana, a ver mucho fútbol.
¿Qué planes te marcas?¿Cuáles son los objetivos que te
fijas en tu cargo?
Crecer en
número de licencias, potenciar las competiciones de fútbol base, invertir en
proyectos sociales y que Madrid sea un ejemplo a seguir para otras Comunidades.
En cuanto a las selecciones, somos conscientes de qué significa representar a
Madrid y haremos el camino lo mejor que sepamos. Ilusión, dedicación y esfuerzo
no va a faltar.
¿Cómo ves la situación actual del fútbol femenino en
nuestro país y en concreto en nuestra de Comunidad?
Creo que el
fútbol femenino está en un momento muy dulce, no sólo en nuestro país. Tanto el
Mundial de Canadá como el Europeo de este verano han sido un gran empujón. La
Liga Iberdrola ya es un producto muy atractivo y el camino hacia la
profesionalización ya se está marcando. El siguiente paso será hacer una liga
más competitiva y a partir de ahí, ya sólo podemos ir hacia arriba. Respecto al
fútbol de nuestra Comunidad, tenemos la suerte de tener mucho nivel. Contar con
3 equipos en Primera División y tener tantas niñas iniciando la práctica en
edades muy tempranas creo que son garantías de éxito para el futuro.
¿Crees que se le está faltando el respeto y que se le
da menos importancia de la que realmente tiene al fútbol femenino?
Creo que el
deporte femenino en general y otras muchas disciplinas deportivas, no reciben
la atención que merecen.
¿Qué consideras que hace falta para dar el impulso
definitivo y, de verdad, se profesionalice el fútbol femenino en nuestro país?
Que tengamos
una competición más atractiva. La reestructuración de competiciones a nivel nacional
es necesaria e inminente. Tenemos una Primera División con 16 equipos y una
Segunda División con más de 100; y eso nos aleja de las grandes potencias.
Tengo constancia de que ya se está trabajando en ello y estoy segura de que eso
será el impulso definitivo a nuestro fútbol. Además, el trabajo de todos.
A modo de ejemplo, ¿Cuál puede ser el sueldo medio de
una jugadora en la élite de nuestra liga Iberdrola?
No tengo
cifras al respecto. Además, hay mucha diferencia entre equipos que sí son
profesionales y los que no lo son. Por desgracia, todavía tenemos mucho que
recorrer. Las jugadoras todavía no tienen las mejores condiciones y ese es otro
de los puntos claves para ese impulso definitivo.
Dicen que eres una de las mujeres españolas más
formadas futbolísticamente, (llevas dos
años trabajando para UEFA y FIFA como analista, seleccionadora de
Azerbaiyán)….¿Cómo logras llegar hasta aquí, ¿Cómo es tu formación para
conseguir estos conocimientos?
Bueno, como te
decía al principio... me siento muy afortunada y creo que estoy en un entorno
privilegiado. La oportunidad para ir a Azerbaiyán llegó cuando menos me lo
esperaba y a raíz de marcharme, surgió todo lo demás. Los técnicos españoles
estamos muy valorados en el extranjero. La formación universitaria junto con la
licencia UEFA Pro y controlar el idioma, me abrieron muchas puertas. Luego sólo
hay que estar dispuesta a marcharse cuando llega la oportunidad.
¿Cómo puedes aprovechar tu experiencia y contactos a
nivel internacional para mejorar el fútbol femenino de Madrid?
La experiencia internacional me ha aportado una visión
muy global en distintas áreas de nuestro deporte. He tenido la suerte de
trabajar en muchos países y conocer estructuras muy diferentes. Al final creo
que las experiencias son lo que nos enriquecen y saber quedarnos lo mejor de
cada una de ellas. Eso es lo que intento aplicar aquí, las mejores prácticas de
otros sitios.
Fuiste jugadora del Rayo Vallecano, pero una lesión te
cortó tu carrera…¿Qué se le pasa a una por la cabeza cuando con 21 años tienes
que dejar de hacer lo que más te gusta?
Fue una
decisión dura pero no tan difícil gracias a los banquillos. El mismo año que me
retiro, estoy entrenando al infantil femenino. Disfrutaba mucho de ello y eso
me ayudó a digerirlo mejor.
Tras el enorme palo, lo asimilas y te dedicas a
formarte y ser entrenadora…Supiste adaptarte y mirar hacia adelante…¿Qué
mensaje le mandas a aquellos jugadores/as que estén viviendo esa situación?
Siempre pienso
eso de que “todo pasa por algo”. La constancia y la paciencia nos acaban
siempre llevando a donde merecemos, y pensar así me ayuda.
Es difícil vivir de esto en el fútbol masculino, pero
en el femenino, lo de ser entrenadora es casi imposible, ¿no?¿Cómo fue tu
experiencia personal?¿Cómo surge lo de seleccionadora de Azerbaiyán?
Surge estando
en el RVM. Siempre digo que la decisión valiente no es la de marcharme sino la
de elegir esta carrera por todas las dificultades que conlleva. Viendo la
experiencia en Azerbaiyán con perspectiva, puedo decir que me aportó muchísimo
en el plano profesional pero también en lo personal. Es verdad que el primer
año allí fue duro, pues requiere una adaptación, pero todo lo que me ha dejado
es muy positivo.
Una decisión valiente y arriesgada… supongo tuviste
que renunciar a muchas cosas…¿Qué aprendiste de esa experiencia?
Ya lo
comentaba antes. A ser paciente, a ser muy tolerante... A elegir bien qué
batallas quiero luchar. Y por último, a saber marcharme de los sitios. Los
cambios no son fáciles pero es la única manera de crecer.
¿Por qué decides volver a España?
Por eso mismo,
porque creí que para seguir creciendo tenía que cambiar. No sabía hacia dónde
era ese cambio y al final tuve la suerte de poder volver a casa.