martes, 25 de octubre de 2016

Javi Moreno, entrenador de la AD Alcorcón B "Siempre he valorado y reconocido todo lo que rodea al fútbol modesto”


Nuestro protagonista de hoy llegó a ser subcampeón de la antigua Copa de la UEFA con el Alavés. Una magnífica temporada en Vitoria, donde marcó 28 goles, le sirvió para emigrar al Calcio fichando nada más y nada menos por el Milán. Y de ahí, entre otros al Atlético de Madrid o Zaragoza para terminar su carrera en la segunda B jugando con el Lucena.

Ahora Javi Moreno, está labrándose su carrera en los banquillos de nuestra Comunidad dirigiendo al Alcorcón B, tras haber pasado anteriormente por el Utiel y el Novelda.
Deliciosa conversación con un jugador que será recordado como uno de los mejores delanteros españoles de la década de los 90. Un lujo poder contar con gente con tanta experiencia en la élite como Javi y que respete y quiera tanto lo que rodea al fútbol modesto y estas categorías.




¿Cómo surge la opción de ser entrenador del Alcorcón B y venir al fútbol madrileño?

Pues nada estaba en Valencia y me llamó el director de la Escuela del Alcorcón comentándome la posibilidad de ir. Le dije que me dejara pensarlo una hora porque me pilló de sorpresa ya que, sinceramente, no me lo esperaba. Así que le devolví la llamada y le dije que sí. Y nada estoy muy ilusionado de poder trabajar con gente joven. 

Has entrenado en el Utiel y en el Novelda ¿Mucha diferencia de nivel entre la tercera valenciana y la madrileña? ¿Dónde están las principales diferencias?

En la valenciana hay seis o siete equipos que son los que marcan la diferencia y los que tienen  el presupuesto más elevado y el resto pelean por no descender. Sin embargo, en la madrileña, existe mucha igualdad, se dan muchos empates y  vitorias por la mínima... En Valencia sabes que estos seis o siete esos equipos luchan por estar arriba y en Madrid no pasa esto.

Con la vida resuelta, ¿Qué te impulsa a entrenar desde abajo y sacrificar tiempo a la familia?

La decisión la tomé yo, ellos saben que es mi trabajo. Y nada, me gusta empezar por abajo como hice cuando era jugador. Así se saborean mejor los éxitos y los disfrutas más porque ves todo lo que has dejado atrás. Y lo entrenar, pues es lo mismo. Es una motivación muy grande entrenar equipos humildes y ahora un filial e ir viendo cómo vas creciendo.




Llevas varios años en esta categoría pero, ¿Cómo se adapta uno y cambia el chip  para pasar del fútbol de élite al fútbol más modesto?

La suerte que he tenido es que, como he vivido siempre todo desde pequeñito, para mí ha sido muy fácil adaptarme.  Sabía lo que hay y sé a lo que vengo. He tenido la suerte de llegar a la élite pero también he tenido la suerte de estar abajo, en las categorías más modestas.

¿Qué es lo que te estas llevando a nivel personal?

Es un aprendizaje personal, sobre todo, ver cómo la gente disfruta de su trabajo, y más la gente joven. La oportunidad que me ha dado el Alcorcón es un regalo, estoy muy contento con poder transmitir a los chavales lo que he aprendido de mi experiencia en el fútbol.

¿Qué crees que te puede aportar tu experiencia como jugador de élite en los banquillos?

Para transmitir todas mis vivencias y experiencias que he tenido en el fútbol, en los vestuarios. La tercera división es una categoría difícil y complicada, por lo que trato de adaptar a los futbolistas para que den el salto lo antes posible arriba y lleguen en las mejores condiciones posibles. Por ejemplo, si Julio Álvarez, convoca a un chaval, pues intento que ese futbolista dé el salto a la segunda división en las mejores condiciones posibles.  




¿Qué dices a quienes os ven a los ex jugadores famosos con cierto recelo cuando os metéis a entrenador? ¿Lo tenéis más fácil que el resto de entrenadores que no han jugado nunca?

No sé si más fácil. Puede ser que tengamos mas facilitad a la hora de entrar en un equipo, pero también hay entrenadores que no han jugado en ningún equipo y son igual de buenos de los que hemos jugado. Eso no quiere decir nada.

¿Dónde o cómo se disfruta o se sufre más, como jugador o entrenador?

Depende. Cuando eres jugador te preocupas de ti mismo, de estar bien  y jugar. Sin embargo, cuando eres entrenador estas al cargo de 22 personas y tiene que intentar que todos estén felices y contentos, aunque es algo realmente difícil.  Pero la forma de disfrutar o sufrir es diferente. Un entrenador se va a casa y le da muchas vueltas a la cabeza, tiene que decidir quién va convocado, quién tiene que jugar. Por el contrario, un jugador sólo tiene que entrenar para estar bien físicamente.

Supongo que entrenar a un filial con gente joven es un doble reto…¿Qué es lo más difícil de entrenar a jugadores de esas edades?

Son gente con mucha capacidad, lo único tienen que aprender la pillería dentro de un campo de fútbol y, sobre todo, estar muy bien físicamente. Hoy en día el fútbol te exige eso, en cualquier categoría. Intento que mis futbolistas me aguanten los 90 minutos y lleguen  en las mejores opciones posibles. 




Como entrenador, ¿Se puede ser amigo de un jugador?

Sí, tengo ex jugadores que he entrenado en el Novelda o en el Utiel que son grande amigos míos, aunque reconozco que es difícil. Porque tú eres el entrenador y siempre vas a ser el malo... Pero claro que puedes llegar a ser amigo de un entrenador.

¿Quién es tu modelo a seguir?

Fijarme me fijo en todos, pero, dependiendo de los futbolistas que tengas, tendrás que hacer  un sistema u otro. Así que fijarte sólo en uno es imposible.  A mí me gusta mucho Paco Jémez, que ha sido compañero mío y también le he tenido como entrenador.  Me gusta su carácter y forma de ser.

¿Qué consejos les darías a los que sueñan con llegar a la elite?

Que sean ellos mismos y que no cambien su carácter y su forma de ser. Y  que compitan, que cada vez que vayan  a entrenar que es una hora u hora y media que entrenen con la mayor ilusión posible porque eso les va a hacer llegar a ser mejores futbolistas. El futbolista que se queja y pone problemas es más es difícil que llegue arriba. El que compite y se esfuerza  tiene la recompensa.




¿Valoras ahora más a los que forman parte del fútbol modesto?

Siempre he valorado y reconocido las categorías inferiores, las más modestas porque he tenido la suerte de jugar en tercera y segunda B y sé lo que es eso. Y siempre voy a tener el máximo respeto por todos ellos porque son parte del fútbol y en cualquier momento pueden llegar a la élite.

¿Qué objetivo te marcas en los banquillos?

Intentar hacer todo lo posible para que el entrenador del primer equipo cuente con los jugadores que tengo en tercera división y luego mantener la categoría. Si logramos algo más, pues mejor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario