viernes, 2 de septiembre de 2016

Jorge Bolaños, presidente del club Dragones de Lavapiés “Tratamos de promover la convivencia en la diversidad que tenemos en el barrio con muchas múltiples nacionalidades, razas, culturas y situaciones complicadas, tanto personales como familiares”







Nuestra primera entrada después de las vacaciones rompe un poco con la dinámica que normalmente solemos tener en el blog. Esta vez no entrevistamos a nadie relacionado con la segunda B, la tercera o la preferente madrileña. Bajamos más escalones todavía y nos fijamos en un proyecto que representa a la perfección lo que es el fútbol de base. 

Nos referimos al club Dragones de Lavapiés que, como explican en su web, se trata “de una iniciativa vecinal, puesta en marcha por un grupo de madres y padres del barrio, para que Lavapiés Embajadores contara con su propio club de fútbol 7, una demanda existente y palpable entre nuestros chicos y chicas.” 

Al mismo tiempo, tratan “de impulsar un proyecto de deporte base que se adaptara a las características de nuestro entorno, que fuera participativo y abierto, que las familias sintieran como un espacio propio y que ofreciera una buena formación deportiva, fuera de la exacerbada competitividad tan común en el fútbol base que impera nuestra ciudad y de los precios elevados inasequibles para gran parte del vecindario”.

Interesantísima charla con Jorge Bolaños, presidente del club Dragones de Lavapiés (Fotos web del club)





¿Cómo, cuándo y por qué surge este proyecto?

Surgimos a mediados del año 2014 y  fue un proceso totalmente desde abajo. Fuimos un grupo de padres del barrio que nos conocíamos del colegio de los niños o del parque y teníamos relación hace tiempo entre nosotros. Además, algunos habíamos tenido a nuestros hijos en las canteras de los grandes equipos de la capital y no nos convenció  el ambiente tan competitivo que hay en esas categorías en las que juegan niños de 6 o 7 años, ni la presión que existe sobre los chicos o, por ejemplo, el mal  rollo existente entre los padres...

Y, también, surgió porque en el barrio de Lavapiés- Embajadores es un barrio que desde hace muchos años se está moviendo en el ámbito cultural  con muchas cosas para niños e iniciativas vecinales y sociales. 

Sin embargo, no había nada serio en deportes. Hay colegios que fomentan el fútbol sala, otros proyectos que no terminaron saliendo en baloncesto... Y nada, en definitiva, nos pareció interesante presentar este proyecto deportivo que se identifica con el barrio. Así empezó todo de cero, sin tener nada, poco a poco, creciendo hasta hoy.  





¿Cuáles son las señas de identidad de los Dragones de Lavapiés?

Promover la convivencia en la diversidad que tenemos en el barrio con muchas múltiples nacionalidades, razas, culturas y situaciones personales y familiares. Disfrutar y  convivir con esa diversidad, ésas serían brevemente nuestras señas de identidad como club.

21 nacionalidades distintas, ¿Cuál es el secreto para la convivencia entre tantas culturas diferentes?

Tener mucha paciencia, mucha mano izquierda, conocer a las familias  y a los chicos, pasar muchas horas con ellos… Así, poco a poco, los problemas que se han ido presentando los hemos ido resolviendo entre todos. Diálogo y normalizar la convivencia es lo buscamos. La integración ya se ha logrado en el barrio y lo que hay que tratar de fomentar es el deporte inclusivo. Hay que estar en el mismo nivel, más que pensar yo te integro, es mejor pensar yo convivo contigo en el mismo plano. 




¿Cómo se organiza el club desde el punto de vista administrativo?

Tenemos una Junta Directiva, pero  somos pocas personas y somos un poco desastres con el tema de papeles y demás. Es complicado porque trabajamos y le dedicamos el poco tiempo que tenemos. Nos gustaría ampliar la masa social del club y, aunque las propias familias colaboran con fiestas y eventos, sí que es cierto que queremos ampliar la masa social y más personas  se sumen a este proyecto. Tienes que estar muy implicado y convencido con la idea y echarle muchas horas. 

¿Con qué recursos contáis  a nivel personal  deportivo me refiero entrenadores? 

Tenemos entrenadores que están haciendo un trabajo impresionante. Hay que tener en cuenta que nuestros equipos de fútbol base entrenan en campos de fútbol sala y luego juegan en campos de fútbol 7, con lo que es un hándicap importante. 

Algunos se han sacado el nivel 3 de entrenador. Hay otros que tienen nivel 1. Otros están empezando y van a matricularse en los cursos. Con los entrenadores estamos muy contentos por su trabajo, dedicación e  implicación. Pero estamos en precario en otras cosas, por ejemplo, no tenemos fisios, no tenemos seguro médico, pero, poco a poco, vamos a ir solucionando estas cuestiones.




¿Qué objetivo os marcáis a nivel deportivo y formativo con los chavales? 

A nivel deportivo hemos estado jugando en ligas municipales y queremos ir  federando  cada vez a más equipos. El  objetivo no puede ser ganar, a pesar de que los resultados son buenos. Tenemos varios subcampeonatos  de liga municipal, una copa de primavera… pero el objetivo es competir bien…  Jugar y pasarlo bien y hacer un buen papel en las competiciones donde juguemos. 

Respecto al tema formativo, aparte de enseñarles a convivir y respectar al rival, queremos enseñarles  a jugar lo mejor posible al fútbol.


¿Cuánto cuesta hacerse socio y de qué formas más se puede ayudar al club?

Son 25 euros anuales. Ahora estamos en plena campaña de captación de patrocinadores. Tenemos unas redes sociales muy activas  y ofrecemos la posibilidad  de  poner un banner cada cierto tiempo y menciones en la web, en Facebook…
Tenemos casos de gente que les gusta lo que hacemos y nos dona 100 eurillos para balones o cualquier otra necesidad que tengamos.

¿Con qué instalaciones y medios contáis para entrenar y jugar?

Las instalaciones en el distrito centro y en el barrio de Lavapiés y Embajadores  son casi inexistentes. Tenemos que entrenar en canchas de fútbol sala y unas pistas muy saturadas porque son las únicas del barrio. Ahora hemos tenido acceso unas horas en la Chopera del Retiro,  pero es difícil porque hay entidades como la Fundación del Real Madrid que tiene un número que consideramos desproporcionado de horas  por un convenio que se ha ido renovando y que ya hemos reivindicado ante el ayuntamiento. Creemos que es un convenio ilegítimo y vamos a intentar lograr más horas de entrenamiento en la Chopera del Retiro, que nos pilla a 20 minutos de paseo.




¿Con cuántos equipos y jugadores cuenta el club?

El primer año teníamos 5 equipos y este año ya 8. Tenemos siempre una población flotante de inscripciones  de chicos y chicas que estimamos serán unas 120  fijas desde pre benjamines a cadetes y este año ya tenemos un equipo de juvenil fútbol 11.

¿Recibís algún tipo de ayuda o subvención?

Esta temporada hemos tenido un proyecto, porque tenemos una relación bastante buena con  el departamento de Educación del distrito centro, y hemos colaborado con un programa de prevención de absentismo escolar. Este año también se repetirá. Y tenemos un convenio pendiente de firma y de estudio a ver si nos convence entre la Junta de distrito y la Fundación  del Atlético de Madrid. Esto sería una ayuda importante.

Y esperamos tener unas noticias buenas de patrocinios, que esperemos se terminen concretando.

¿Qué os haría falta para hacer frente a las necesidades más inmediatas y crecer?

Para poder seguir creciendo lo más importante es el tema de las instalaciones. Lo otro puedes ir tirando e ir encontrando soluciones y  ayudas. Pero tener el acceso a las instalaciones es muy difícil. Para entidades como la nuestra que empezamos de cero, nos ponen muchas dificultades. No solo respecto a la diferencia de superficie entre el fútbol sala y el fútbol 7, sino, también, lo que supone entrenar en hierba.




¿Cuáles son las principales normas que deben de acatar los padres y niños para formar parte del club?

Con los padres en general hemos tenido muy pocos problemas. En algunos casos porque apenas van, lo cual nos da pena pero lo entendemos porque son situaciones familiares difíciles. Sí que con la experiencia que hemos tenido huimos de presiones a los chicos y de las protestas a los árbitros. 

Y con los niños, ¿se les exige algo con el tema de los estudios para jugar al fútbol?

Entramos en un tema complicadísimo. Tenemos un problema muy serio de absentismo y las notas. Nosotros no podemos hacer como otras escuelas y exigir notas. Aquí el objetivo es suspender las menos posibles y es muy difícil. Tenemos un control permanente y muy fluido con educación y servicios sociales del distrito pero es muy complicado.




He leído que algunas familias decidieron sacar a sus hijos de los equipos juveniles de grandes clubes deportivos, en los que percibían demasiada competitividad y “muy poco buen rollo”. ¿Se ha cargado el futbol actual los valores que deberían existir en un deporte como este?

Estoy convencido de que sí. Mi hijo estuvo en la cantera del Rayo y del Atleti... Si no se lo toman en serio se van a cargar el fútbol. Yo presencié peleas de padres en las gradas, insultos, mal ambiente porque mi hijo no juega y el tuyo sí. Salí espantado de lo que se ven en las canteras de los equipos grandes porque no es un ambiente adecuado para los niños.

¿Qué opinas de todo lo que rodea al fútbol de élite?

Somos bastantes románticos con el fútbol. Hemos vivido el fútbol muy cerca con equipos modestos y nos escandalizamos y no compartimos con lo que se ve en el fútbol de élite. Por ejemplo, prefiero los play off de ascenso de los equipos de Madrid  en el mes de junio, porque eso es el fútbol real, el que emociona… el resto se ha desvirtuado.




¿Cómo gestionarías si viene un Madrid, Atleti, Leganés, Rayo o Getafe a por un chaval de vuestro club?

Tenemos dudas. Tenemos ese debate con los entrenadores. Sí que ha habido algún chaval que se ha ido voluntariamente a otro equipo y la verdad es que no sabemos qué hacer. Hay quienes dicen que es estupendo para  el chaval y lo que hay que hacer es ayudarle. Esta opción es lo que piensa la mayoría. Pero también  hay quien opina que se puede pedir una compensación, pero yo no lo veo claro. Si se da el caso, será un buen tema de debate.

¿Cuál es el reto a corto plazo de este proyecto?

Empezar la temporada sin sobresaltos, sobre todo, con los temas burocráticos y demás…  Poder llevar el proceso de inscripción con la máxima normalidad. Estos momentos generan mucho estrés…

En lo deportivo disfrutar lo máximo posible y a los equipos a los que se les pueda exigir pues que mantengan por lo menos los resultados del año pasado. Pero para nosotros poder salir con todos los equipos cada sábado a jugar ya es un triunfo. Si encima, además, si los chicos juegan bien y llega un resultado positivo, pues a disfrutarlo y, sobre todo, consolidarnos  a nivel institucional. 



¿Ves posible que el club pueda tener en un futuro un equipo en la preferente o en la tercera división?

Sinceramente alguna vez lo he pensado, pero lo importante es que a medio plazo, logremos que el barrio se identifique con nuestro proyecto. Si lo logramos, habremos conseguido el objetivo. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario